Para la mujer que desee disfrutar una sana actividad sexual en la menopausia debe en primer lugar estar completamente informada de los cambios que afrontará; la visita al ginecólogo es primordial para estudiar su estado físico y hormonal. Su médico la orientara en las ventajas y limitaciones del remplazo hormonal.
A continuación algunas recomendaciones para preparar su cuerpo en esta etapa:
· Decidir con su ginecólogo el uso de terapia hormonal que mas le convenga.
· Tener una adecuada y balanceada alimentación.
· Buena condición física que se logra con una rutina de ejercicios cuando menos 4 veces por semana con una duración aproximada de 45 a 60 min.
· Mantener control de lípidos y glucosa en sangre.
· Control del peso y tensión arterial.
· Atender los cambios ginecológicos en relación a útero, ovarios, genitales y mamas
· Mantener una lubricación en caso que esta se reduzca e impida un buen desempeño sexual.
En la esfera afectiva:
· Aceptación de la menopausia como una etapa normal en la vida de la mujer.
· Buena comunicación con la pareja e hijos a quienes se informan de los cambios presentados. (Físicos, emocionales, sociales)
· Establecer con la pareja que expectativas se tienen en relación al sexo.
La menopausia se lleva mejor cuando se atiende con prioridad el estado de salud, y se tiene claro los límites que se afrontan en esta nueva modalidad hormonal.
La decisión de frecuencia en los encuentros sexuales debe ser motivada únicamente por el deseo mutuo de encontrar placer con la pareja, ya que el coito por obligación marital o falto de deseo no genera salud y muchas mujeres se refugian en la enfermedad como excusa para evadirlo y al final se encuentran verdaderamente enfermas, como consecuencia de encuentros sexuales no deseados….
Por el contrario una relación sexual placentera produce endorfinas que son beneficiosas para mantener la salud, suavizar el carácter y afrontar en forma asertiva el día a día.
Es importante estar claro que el avance tecnológico permite con la aparición de nuevos fármacos prolongar más el rendimiento sexual, sin embargo la iniciativa personal y de pareja orientada con conocimiento de su cuerpo y limitaciones marca la pauta para alcanzar la verdadera satisfacción sexual.